Dimite un alcalde vizcaíno del PNV tras admitir que gastó 5.000 euros sin justificar

Otro cargo público pillado con el mal uso del dinero público. El alcalde del municipio vizcaíno de Galdames, Asier Larrucea (PNV), ha dimitido de su cargo tras no poder justificar 5.000 euros de gastos. Procedían de una tarjeta de crédito que gestionó el ya el ex alcalde pese a la advertencia contraria del secretario municipal, quien rechazó su uso. Larrucea ha pagado al ayuntamiento los 5.000 euros y el pasado 18 de octubre, en un pleno municipal extraordinario con su dimisión como único punto del orden del día, presentó su renuncia por “motivos personales”.

Este caso se remonta a septiembre de 2015, en el inicio de la legislatura municipal tras las elecciones de mayo de ese año. El alcalde de un municipio de cerca de 800 habitantes pidió que se consignase una tarjeta de crédito de sus gastos en los presupuestos municipales. El secretario municipal le advirtió de que no era posible pero Larrucea se autogestionó la tarjeta.

La oposición municipal (formada únicamente por EH Bildu, con tres concejales, frente a los 4 del PNV) no se enteró del hecho hasta el pasado año con el cierre de las cuentas de 2015 donde aparecían los gastos de la tarjeta del alcalde. Entonces, exigieron los extractos de los gastos y se encontraron con que sólo aparecían justificados 910 de los cerca de 6.000 que se reflejaban. Entre los gastos justificados, hay una factura de más de 300 euros de cuatro comensales con platos como besugo y marisco. El secretario, según fuentes municipales, ha rechazado varias facturas de gastos presentadas por el alcalde.

Llegó la segunda advertencia del secretario municipal quien pidió al alcalde una justificación de esos 6.000 gastos. Sin respuesta.

El asunto se trató en el pleno municipal ordinario, el pasado 8 de septiembre, tras una nueva pregunta de EH Bildu. La respuesta de Larrucea (audio del pleno municipal) sobre sus gastos en la tarjeta de crédito es que “se gasta en comidas a políticos y técnicos para traer dinero al pueblo, como se ha hecho siempre”. El entonces alcalde, tras la insistencia de la oposición, dijo textualmente: “Lo que está sin justificar se abonará”. Para entonces, ya cambió la tarjeta de crédito por una débito, en este caso que si estaba autorizada por el secretario municipal.

En las semanas siguientes Larrucea aportó los 5.000 euros sin justificar al secretario municipal, según han confirmado fuentes municipales.

El 18 de octubre convocó el pleno extraordinario para formalizar su dimisión, en el que su única su única explicación (oir audio) fue que “los motivos son personales. La retirada es para hacer otras cosas, de mi familia y trabajo”. La oposición le reprochó que llevaba “un año haciendo caso omiso de las advertencias” del secretario sobre el uso de la tarjeta. Larrucea no dio más explicaciones. Intervino una concejal de su partido, el PNV, para asegurar “que no es un caso de corrupción” y conminó a la oposición “a documentarlo”. El implicado solo intervino otra vez para afirmar: “Por orden del alcalde se levanta la sesión”.

Aunque no sea un monto importante, es de extrema gravedad el gasto de cualquier cantidad dinero público sin justificar y con la advertencia contraria del secretario municipal. La devolución de 5.000 euros confirma la irregular actuación y puede ser un atenuante si el caso llega a la vía penal, bien por denuncia de algún partido o por una actuación de oficio de la Fiscalía. Y tiene todo el cariz de que alcalde ha sido invitado a dimitir por su partido que, como hacen todas las formaciones políticas en situaciones similares, se ha esforzado en ocultar el caso.