8 ejemplos del caos en la Renta en Bizkaia: declaraciones erróneas a pagar hasta 36.000 euros

La campaña de la Renta en Bizkaia, que iba a ser la más moderna y novedosa en España al facilitar la declaración hecha a los casi 600.000 contribuyentes vizcaínos, es un auténtico caos. Este blog ha recopilado ocho casos de declaraciones erróneas enviadas: Jubilados a los que obligan a pagar 20.000 euros, un vizcaíno a quien, por vender la casa de su padre fallecido, le aparece que tiene que pagar 36.000 euros, autónomos en paro con declaraciones a abonar más de 2.000 euros o una pareja (uno de ellos en desempleo) que todos los años percibe una media de 2.000 euros y han recibido la comunicación de pagar 20.000 euros.

El lema “Renta Fácil” de la campaña del IRPF (Impuesto de la Renta de las Personas Físicas) ya es motivo de sarcasmo por parte de asesores fiscales y contribuyentes. Lo que se presentaba como una campaña sin ningún esfuerzo para los contribuyentes (La Hacienda Foral hace la declaración de Renta a todas las personas de Bizkaia), es todo lo contrario. En años anteriores, la Hacienda vizcaína enviaba hechas a los domicilios más de la mitad de las declaraciones de la renta y la inmensa mayoría estaban correctas, con lo que el contribuyente solo daba su visto bueno. Para los que no recibían el documento confeccionado, estaba la opción de realizar la declaración de manera personal, a través de asesores o en citas con entidades bancarias.

Este año, con la promesa de un modelo más sencillo, se han eliminado las citas bancarias.  Si hay errores en la declaración, el contribuyente debe solventarlo por sí mismo o pagar entre 50 y 100 euros a un asesor fiscal.

Los disgustos entre los vizcaínos al recibir la comunicación han sido mayúsculos, según los datos recabados por este blog. Un contribuyente vendió la casa de su padre fallecido y en la carta de Hacienda le sale a pagar 36.000 euros. Es un error que se sucede: la Hacienda vizcaína solo le ha computado el precio de venta, sin incluir el de adquisición.

Otra pareja, que realiza todos los años la declaración conjunta (ya que uno de los cónyuges está en paro) y tiene una media de 2.000 euros de devolución, recibe la comunicación de que debe pagar 20.000 euros. El motivo es que vendió un inmueble por 100.000 euros y Hacienda tampoco ha incluido el precio de adquisición.

A otra contribuyente le sale a abonar 4.000 euros cuando todos los años paga o le devuelven una pequeña cantidad. En la declaración le sale la venta de un garaje por 12.000 euros, pero de nuevo no se incluye el precio de l compra. Otro jubilado ha recibido la comunicación de que debe pagar 6.000 euros “y todavía no sabe por qué”, señala un asesor fiscal.

“Todos los que han vendido algo, sean viviendas o acciones, les sale a pagar y mucho dinero. Encima, con la pandemia, mucha más gente ha tenido que desprenderse de bienes, con lo que hay muchos afectados,” agrega. “En los varios cientos de casos que me han llegado, solo conozco dos declaraciones que estaban bien”. Un testimonio que contrasta con las declaraciones, la pasada semana, del diputado foral vizcaíno de Hacienda, José María Iruarrizaga, quien dijo públicamente que “los errores son puntuales y afectan a pocos”.

Otro jubilado que dona todos los años 3.000 euros a una ONG ha comprobado que le han computado solo 70 euros y la declaración le sale a pagar 400 euros, cuando siempre le sale a devolver.

Un vizcaíno autónomo sin trabajo desde hace un año, con motivo de la pandemia, se ha encontrado con una declaración que le obliga a pagar 2.000 euros cuando los únicos ingresos han sido las ayudas públicas para los damnificados, unos 800 euros mensuales en su caso.

A despachos de abogados, que deducen el pago de las mutualidades para sus futuras pensiones, no les aparece este abono. Otro letrado se ha encontrado que le han eliminado la deducción por hijo, cerca de 300 euros.

Hasta este lunes, dos semanas después de iniciarse la campaña, los vizcaínos no podían ni siquiera ver el borrador de la declaración de la renta, lo que imposibilitaba conocer los datos en los que se basaba Hacienda para realizar los cálculos. Ahora ya existe una pestaña en la web con esos datos.

Otro asesor revela que el nuevo modelo ha enviado la declaración hecha también a quienes no están obligados a tributar, como jubilados o trabajadores con bajos ingresos. “Les confunden sobre sus obligaciones y más, si es gente mayor. Hay pensionistas que les han llegado a ingresar 11 euros cuando no han presentado una declaración en su vida”.

El nuevo modelo, según coinciden varios asesores fiscales, ha obviado que muchos vizcaínos no tienen ordenador, ni internet, ni están cualificados para realizar una declaración telemática. “Al no tener la cita con el banco, como otros años, les obligan a ir a un asesor y pagar 50 o 100 euros”.

Los múltiples errores están suponiendo además un retraso en los pagos. En años anteriores, los vizcaínos que recibían la declaración confeccionada recibían el dinero en unos días, incluso al día siguiente del inicio de la campaña. “Ahora, en Hacienda, te dicen que, al modificar la declaración con los datos que no ha incluido la propia Hacienda, no puedes recibir el dinero en unos días, sino que tienes que esperar al menos un mes”. Un estropicio económico para muchas familias para quienes la declaración supone una paga extra anual para sus cuentas.

La que iba a ser una Renta Fácil en Bizkaia, se ha convertido en un gran dislate. Contribuyentes y asesores tienen que modificar sus declaraciones cuando en años anteriores no tenían que hacer nada, muchos aún siguen con el susto de encontrarse con una carta que les obliga a pagar decenas de miles de euros y las clases más bajas se encuentran forzadas a gastarse dinero en asesores para cumplir con sus obligaciones fiscales. Y, mientras, en la Diputación de Bizkaia, no se ve ninguna gravedad en el nuevo modelo.